jueves, 27 de febrero de 2025

¡Ah, amados hijos míos, si conocierais la grandeza, la inmensidad de mi amor por vosotros, sucumbiríais a él!

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo a Cristina en Francia el 4 de febrero de 2025

A las 18 horas

El Señor - Hija, los tiempos deben cumplirse y deben venir grandes tribulaciones para que los hombres rebajen su orgullo y se humillen ante Mi Rostro. Tomad las migajas que caen de Mi mesa y seréis transformados y viviréis en el Espíritu. Pero vosotros os alimentáis de carne y orgullo, incluso podéis superar el orgullo del Diablo y siempre queréis más gloria, más poder, más riqueza. Es más, tendréis lo que os merecéis y la llama caerá sobre vosotros para mostraros que no sois los amos del tiempo ni los amos de los relojes, ¡porque el Diablo os ha hecho creer eso, se ríe y se burla de vosotros! ¿Con qué orgullo vestís vuestros corazones, si no es con el del Diablo?

Pobres niños perdidos en los vericuetos del mundo, volved a Mí, volved a Mi Corazón y Yo os llevaré en Mi seno y recibiréis el sello de Mi amor y Yo os libraré de los opresores y del Opresor; y embelleceré vuestros corazones con Mi Palabra y haré de vuestras almas un adorno real donde cada día Me invitaré, para traeros Mi Pan de Vida, Mi Palabra de Vida, Mi Palabra de Verdad, que purificará vuestras almas y las alimentará con el Agua Viva de Mi Corazón Divino.

Hijos, vengo a buscar a los Míos, a vosotros que Me escucháis, a vosotros que Me oís, a vosotros que sois Mis seres queridos y a quienes vengo a liberar de las garras de Satanás que está en la hora de su derrota, de su muerte próxima. Sí, será derrotado y no soportará la derrota, por lo que la derrota será su muerte y será sellado para la Eternidad en el Infierno eterno, como todos los que le siguen y pactan con él. No tengas miedo, avanza en silencio y con confianza y vencerás todos los terrores de los demonios. No hagas caso de sus ataques, que no son más que una débil intimidación. ¿No puedo, con una palabra, con un gesto, arrojarle al Infierno eterno? Pues que se quede allí y permanezca allí, ¡he venido a liberar a Mis hijos de los ataques y mentiras del Mentiroso! Es un mentiroso, ¿me oyes? ¡Un mentiroso! ¿Qué verdad puede portar? ¡Ninguna! Es un intimidador y trabaja a través del miedo. Todo en él es oscuridad, mentira, ironía, duplicidad. El sudor de su frente sólo es muerte y la muerte, la muerte que tanto deseaba para Mis hijos, se apoderará de él, caerá de espaldas y sucumbirá.

Hijos, en Mi Cielo de Gloria, espero a cada uno de los Míos a quienes amo. Sí, hijos, os amo, no como vosotros Me amáis, sino con el Amor que Soy, con el Amor de un Hermano, con el Amor de un Padre, con el Amor de vuestro Dios Todopoderoso que Soy. Hijos, amo a Mi Creación y amo a Mis criaturas y vengo en estos tiempos a traeros el Agua viva, no sólo de Mi Corazón, sino de vuestra Salvación, porque quien Me sigue camina y caminará en la Luz, será liberado de las trampas de los demonios, será purificado de las faltas de sus padres y, Conmigo, recorrerá los caminos de Mi Cielo de Gloria.

Sí, hijos, vengo a buscar a Mi pequeño remanente que Me ama y Me suplica, al que extiendo Mi mano para conducirlo por Mi camino, que es Luz y Vida. No temáis, no lloréis, vengo, y vengo pronto, para liberaros de los pesos y las trampas del Adversario. Vengo a tomaros bajo Mi manto, vengo a llevaros en Mis brazos y a coronar vuestra cabeza con Mi Gloria de amor, para protegeros de todos los bandidos, de todos los dispensadores de muerte, de todos aquellos que dañan y que sólo son dañinos. Para aquellos que sólo escuchan la voz del orgullo, la voz de la Bestia, Mi sentencia ya ha sido dictada, porque no quieren enmendar sus caminos, les dejaré ir a la ruina; si vuelven a Mí, les acogeré, pero si continúan en sus caminos, les dejaré ir como a Judas.

Hijos, os estrecho contra Mi Corazón y en Mi amor. Abridme vuestros brazos y anidaré vuestros corazones en Mi Corazón y os traeré fuerza y alegría y os guiaré en el camino, Yo que camino con vosotros, a vuestro lado y también en cada uno de vosotros.

¡Ah! Mis amados hijos, si conocierais la grandeza, la inmensidad de Mi amor por vosotros, ¡sucumbiríais a él! Yo soy el que Soy, Yo soy el que ama, cuyo amor hace florecer de nuevo todos los corazones y perfuma las praderas con Mi perfume de incienso. Hijos, vosotros que Me seguís, sois Mis pequeñas varitas de incienso, Mis pequeñas varitas de incienso que Yo enciendo para perfumar los caminos y hacer que las nubes se inclinen a vuestro paso. Si conocierais Mi amor por vosotros, ¡vuestra alegría sería tan inmensa que os derrumbaríais! Además, me acerco a vosotros suavemente y llevo Mi beso a vuestros corazones.

Hijos, sois Mis amados y vosotros, a quienes he elegido para que Me sigáis, cumplid la tarea que se os ha pedido; soy Yo quien la llevo a cabo en vosotros. ¡Permaneced unidos! Os cubro con Mi manto y os beso con Mis labios para depositar sobre vosotros el incienso de Mi Corazón. Con la señal de Mi Cruz, bendigo tus labios tres veces y guardo silencio en tu corazón, donde estoy y donde resido cuando Me amas. ¡Que Mi Paz te acompañe!

¡Yo Soy!

Origen: ➥ t.Me/NoticiasEProfeciasCatolicas